El artículo de turno sobre cómo escribir bien lo dice claro: allí donde puedas poner una palabra específica, no uses una genérica. Supongo que fue después de leer varios de estos consejos que terminé cobrando conciencia de mi creciente encaprichamiento por las palabras «cosa» y «cosas». Por supuesto, la revelación me puso en alerta: ¿significaba…