Hace poco, navegando por la web, me encontré con The Vault, un archivo online donde el FBI ha puesto a disposición del público copias en pdf de cientos de casos clasificados.
Entre otros muchos podemos encontrar archivos de investigaciones sobre delincuentes famosos como Al Capone, Bugsy Siegel, Bonnie y Clyde, o John Dillinger, y hasta casos célebres sin resolver como el de la Black Dahlia o Zodiac.
Aparte de ser una fuente de entretenimiento para investigadores amateurs o aficionados a la no ficción, estos documentos policiales también pueden ser una fuente de inspiración para escritores de novela negra y policíaca.
Los archivos policiales como fuente de inspiración
Sin ir más lejos, la autora escocesa Val Mcdermid, que acaba de publicar un libro sobre la ciencia forense, declaró en esta breve entrevista que para escribir sus libros acude a menudo a expertos que la ayudan a hacer más creíbles las investigaciones que aparecen en sus libros. De hecho, incluso declara que las consultas con forenses le han llegado a inspirar puntos de partida para sus novelas.
Creo que cualquier autor de novela negra o policíaca debería echar un vistazo a los archivos de The Vault para conocer el tipo de material con el que se trabaja (o se ha trabajado) en investigaciones reales, fijándose tanto en su contenido como su formato gráfico.
Luego está en sus manos decidir cómo usa esa información para inspirar y dar verosimilitud a las investigaciones de sus libros. La propia Val Mcdermid da a entender en la entrevista que la clave no es replicar los datos y procedimientos reales de manera férrea, sino adaptarlos y hacerlos adecuados para la ficción narrativa.
Así que ya tenemos las fuentes de inspiración. Ahora solo nos queda imaginar un caso misterioso y apasionante.
Deja un comentario